Miley Cyrus está harta. No de que la filmen a ella si no de que le agobien cuando va paseando tranquilamente con su familia. Esta semana tuvo un encontronazo con una paparazzo que al parecer estuvo provocando a la artista. Cyrus se acercó hacia ella y le pidió por favor que dejara de grabar.
La paparazzo, obviamente hizo caso omiso a la artista y esta intentó llevar las cosas a buen puerto posando junto a su madre y su hermana Noah a cambio de que la dejasen en paz. Pues ni con esas, después de posar Miley tuvo que seguir aguantando a la chica de la cámara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario